Líneas de corte y sangrado
Cuando trabajamos en un producto gráfico, lo primero que tenemos que saber es qué tamaño o formato va a tener. Un documento se imprime en pliegos de papel de gran tamaño, normalmente 70×50 cms o 100X70 cms. Una vez dispuesto en el pliego, se manipula para darle el acabado final. Es lo que llamamos postimpresión. El papel se corta (proceso de refilado) con unas máquinas llamadas guillotinas y es en este punto donde nos vamos a fijar. Para comenzar bien, debemos tener en cuenta todo el proceso, y en este caso, lo primero es fijarse en el final: el formato del documento.
Líneas de corte
Se llama línea de corte a la línea virtual que indica el lugar por donde será cortado el papel después de ser impreso. En Illustrator, las líneas negras que delimitan el documento son las líneas de corte.
En este documento de Illustrator la línea negra delimita en formato, que marca al mismo tiempo por dónde se cortará el papel.
En cualquier impreso se debe tener especial cuidado de no ubicar ningún componente de diseño (textos, ilustraciones vectoriales o imágenes en mapa de bits) que sobrepase o se acerque a menos de 3 milímetros de la línea de corte. Esto es así para evitar que algún elemento quede por fuera de la publicación final por los desplazamientos que se producen en la guillotina. Es decir, cuando la guillotina corta el papel, puede no ser 100% un corte perfecto y desplazarse micras o incluso algún milímetro de la supuesta línea de corte. Para ello se añade esta distancia interna, la cual llamamos zona de seguridad.
La imagen describe la línea de corte (negra), la línea de sangrado (rosa), las marcas de corte (siempre fuera del documento), la zona de seguridad (donde no debemos poner elementos de diseño) y la zona de tranquilidad donde sí se deben poner elementos. Si queremos llevar un elemento a sangre, sí podemos sobrepasar la zona de seguridad, llevando el elemento hasta las líneas rosas de sangre. Por fuera de esas líneas, debemos eliminar el sobrante.
Las marcas de corte se ubican fuera del tamaño final del impreso. Es decir, las líneas de corte de las que hablábamos más arriba no se imprimen, lo que se imprimen son unas pequeñas marcas que indican por dónde se debe cortar. Estas marcas se llaman marcas de corte y siempre deben estar fuera del documento.
El sangrado o sangre
Es el espacio que se añade a un documento con el objetivo de que los elementos que por diseño van hasta el límite de la página, queden impresos hasta el extremo (sin bordes blancos). Debido a posibles errores de registro en las máquinas impresoras, el sangrado permite establecer un rango mínimo para que el corte se haga en la zona impresa.
Cuando no hacemos bien el sangrado, la máquina cortará y con casi toda probabilidad haya un desplazamiento en el corte. En la primera imagen, vemos dos filos blancos que son causados por ese mal corte. En la de la derecha, vemos como debería quedar con un buen sangrado en el documento.
La sangría generalmente tiene entre 2 y 5 milímetros, pero se suele trabajar siempre a 3mm. Cuando un diseño carece de sangría, debe ser modificado en el proceso de preimpresión para asegurar que el corte pase por la zona correcta.
Aquí tenemos un ejemplo de un nuevo documento de Adobe Illustrator. En la zona de sangrado, escribimos 3mm. Además, también le decimos que nos cree dos mesas de trabajo, teniendo la posibilidad de hacer el tira (cara frontal) y retira (cara trasera) en el mismo documento. En el archivo, las líneas negras marcan el tamaño final. Las rojas el sangrado. Si tenemos algún elemento que vaya en el borde de la tarjeta, tendremos que hacer que llegue hasta esas líneas rojas para que el corte sea correcto.
Como decíamos, la imagen va hasta las líneas rojas para que al ser cortada no haya bordes blancos. Además, eliminamos el sobrante para tener un documento perfecto y que no nos dé problemas a la hora de imponer. La imagen de la derecha sería el retira vacío, donde podemos ver el fondo blanco con las líneas de corte negras, y el sangrado a 3mm de color rojo.
Productos gráficos tridimensionales: Packaging
Si queremos que nuestro producto gráfico sea diferente de un cuadrado o rectángulo, es decir, que tenga formas concretas, desde una tarjeta de visita con los cantos redondeados hasta una compleja silueta para un packaging, debemos recurrir a un troquel. En el caso de la tarjeta no haría falta, ya que para redondear los cantos se usan este tipo de máquinas, pero sí es un troquel en esencia:
Definimos troquel como un instrumento o máquina de bordes cortantes para recortar o estampar, por presión, planchas, papeles, cartones, cueros, etc.
Para representar la línea de troquel que después nos fabricarán, es necesario dibujar una línea perfecta que defina el gráfico con claridad y siempre diferenciando qué es troquel (cuchilla) de hendido (doblez).
Hendido: Cuchilla roma (redondeada)
El hendido es una pieza de la plancha del troquel que se caracteriza por no cortar. Es una cuchilla rebajada que causa el efecto de hundido en el papel o material a troquelar, facilitando así la doblez por el surco que deja.
El metal rebajado a la izquierda, actúa de hendido sobre el soporte (en negro). La cuchilla, a la derecha, lo corta.
Hendido y cuchilla.
Troquel
Es el nombre que recibe la cuchilla que corta, con una forma determinada, el pliego de papel o cartón. Las cuchillas están protegidas por tiras de gomas (en la siguiente foto en rojo) que empujan el papel hacia fuera una vez se ha cortado.
A veces se ven también de esta otra forma, con las gomas cortadas a cuadros:
A continuación un vídeo de la fabricación tradicional de un troquel:
Generando el archivo digital
El tamaño del documento es el límite del total tanto en ancho como en alto, y establecemos una capa que indica las líneas de corte (continua), y los hendidos (discontinua). Normalmente las líneas de corte se ponen en rojo continuo y los hendidos en rojo o verde discontinuo.
El dibujo de la línea de troquel y hendidos se crea en una capa nueva con el nombre TROQUEL, la cual se coloca siempre la primera en nuestra ventana de capas. Además, debemos marcar en Atributos la opción de Sobreimpimir trazo. Ponemos en diferentes capas y colores cada elemento de diseño para distinguirlo mejor y ordenar el trabajo. En una capa el troquel y en otra el diseño. Estas indicaciones serán suficientes para que el operario que realice el troquel no tenga dudas ni fallos.
Este es un ejemplo de cómo debemos preparar un trabajo de troquel en Adobe Illustrator, según los pasos impartidos en clase:
En este ejemplo, vemos una tira de rasgado para la apertura del sobre. Por la línea continua la máquina cortará, y por la discontinua hará los hendidos para doblar.
Resultado real del troquel anterior.
Troquel láser
Como hemos visto el proceso de fabricación de un troquel clásico es manual. Además de relativamente costoso (el de la imagen anterior rondará los 80€), tiene limitaciones. El problema es que no podemos hacer elementos de corte excesivamente pequeños, ya que las cuchillas tienen un límite por su tamaño físico. Es aquí donde entra el troquel láser.
El troquel láser es una técnica “reciente” que permite cortar los productos gráficos con las formas deseadas. Funciona con un haz de luz láser a muy alta temperatura que corta el documento haciendo incluso detalles muy pequeños. Sus ventajas son que es capaz de detallar mucho, es bastante rápido dependiendo del material, y más económico pues permite hacer trabajos únicos sin el desembolso que supone un troquel tradicional. Además corta papel, madera metal y otros materiales, e incluso permite grabar la superficie aplicando menos calor.
Por contra sus inconvenientes son que todavía es caro, deja un borde marrón bastante sutil en los contornos (recordemos que quema el papel), necesita de los hendidos tradicionales y es más lento que el troquel clásico. Aquí tenéis un vídeo de esta técnica: